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Muchas personas están familiarizadas con ciertas razas de perros como el Pastor Alemán, el Dálmata, el Boxer, y tantas otras bastante reconocidas en la sociedad. Sin embargo, hay quienes no saben distinguir una raza de otra a simple vista. Afortunadamente existen varias fuentes donde se puede consultar por una raza de perros específica.

Lo primero que debemos hacer es observar muy bien al perro y anotar ciertas características como el tamaño, la forma del cuerpo, el tipo de pelaje, los colores, el peso de sus huesos en general, la forma de las orejas, y todo otro dato que pueda resultar de interés para ayudar en la búsqueda.

La disputa de jerarquías entre dos machos puede ser una de las causas más comunes de una pelea entre perros. En una situación como esta, cada perro demostrará su superioridad ante el otro, aunque generalmente no se producen mordeduras de mucha gravedad.

Diferentes son las peleas que pueden llegar a producirse entre dos hembras, donde puede haber mayor violencia y la mayoría de las veces resultan mucho más peligrosas. También es cierto que este tipo de enfrentamientos no es muy común, pero debemos saber que cuando ocurre puede llegar a ocasionar graves destrozos e incluso la muerte de una de las dos participantes.

Si bien los perros no pueden hablar, son capaces de expresar sus sentimientos y emociones perfectamente a través de ciertos signos. Nuestras adorables mascotas utilizan un lenguaje corporal para comunicarse con otros animales y con los seres humanos que encuentran a su alrededor. Aprender algunas cuestiones básicas sobre el lenguaje canino nos puede ayudar para comprender mejor a nuestro perro y tener una mejor relación.

Cuando un perro menea la cola significa que está feliz o emocionado. Pero también utiliza su cola para demostrar una situación que lo hace sentir asustado o molesto, colocándola entre las piernas. La cola hacia arriba indica que el perro está atento o interesado en algo.

En una edición anterior hemos tenido oportunidad de hablar sobre algunas manifestaciones del lenguaje de los perros. Pero además de las formas de vocalización a las que suelen recurrir, también se comunican mediante ciertas partes de su cuerpo y determinados movimientos.

Por ejemplo las orejas pueden demostrar diferentes estados de animo. Bastará con observar la expresión del resto del rostro para poder determinar si se trata de una postura amenazante, amistosa, miedosa o una simple muestra de atención a nuestras palabras.

Aquellos que tienen un perro de raza como mascota, seguramente en algún momento se han interesado en conocer de qué se tratan las exposiciones caninas. Tanto para el animal como para su amo, esta experiencia puede resultar muy enriquecedora.

Este tipo de eventos consta de ciertas normas. En primer lugar se divide la cantidad de perros según su raza y se juzga varios de sus aspectos de manera individual, por ejemplo: la pureza de la raza, la postura, la higiene, la salud, entre otras características.

Resulta muy interesante observar las diferentes maneras que busca nuestra mascota para comunicarse con nosotros o con otros animales. La interpretación que podemos tener de cada uno de los gestos o comportamientos de un perro se volverá cada vez más precisa a medida que compartimos más tiempo a su lado.

Estos bellos animales utilizan varias formas para transmitir su mensaje. Uno de los lenguajes más utilizados es el ladrido, el cuál puede variar en cuanto a la tonalidad, la continuidad y la rapidez. El ladrido puede significar un simple saludo o demostración de alegría, pero también demuestra en ocasiones estados de enojo, de alerta, de angustia, entre otras sensaciones.